
Jueves 3 de mayo
De 3:00 a 10:00 pm
Cuando el Alma de México toma el Corazón del Valle de Guadalupe: un encuentro entre tradición y autoría culinaria
En el vasto mapa gastronómico de México, hay regiones que han sabido conservar su alma a través del tiempo. Michoacán es una de ellas. Sus cocinas humeantes, con aromas de maíz, chile y hierbas ancestrales, son testimonio vivo de una tradición que se hereda de generación en generación. El próximo 3 de mayo, esa tradición se servirá en una mesa distinta: la de Corazón D’ Petra, el restaurante insignia de Casa Frida en el Valle de Guadalupe.
El esperado Take Over Gastronómico reunirá a dos cocineros de mundos distintos pero complementarios. La maestra cocinera Blanca Delia, guardiana de las técnicas y recetas michoacanas, compartirá cocina con el chef Carlos Esquivel, referente de la cocina BajaMexa, una propuesta de autor que enaltece los ingredientes del noroeste mexicano con visión contemporánea.
Michoacán: tierra de tradición y fuego lento
La cocina michoacana es un universo de sabores profundos y saberes milenarios. Sus ingredientes hablan de tierra fértil y manos sabias: el maíz criollo en forma de uchepos o corundas; las carnes cocinadas al calor de las piedras en los famosos nacatamales; la charanda, el aguacate, las frutas tropicales, los quelites y la infaltable salsa molcajeteada que da identidad al fogón purépecha. En Michoacán, la cocina no se improvisa: se respeta.
Baja California: frescura, mar y libertad creativa
A cientos de kilómetros al norte, Baja California ofrece otra narrativa gastronómica. Una cocina joven y audaz, donde el producto manda y la creatividad vuela. Sus ingredientes son el reflejo del entorno: el abulón, el erizo, el atún aleta azul, los quesos de Ojos Negros, el aceite de oliva artesanal y, por supuesto, el vino. Aquí, la técnica no sustituye al sabor, sino que lo realza.
Tradición vs. autoría: dos lenguajes que se encuentran
El encuentro entre Blanca Delia y Carlos Esquivel no solo será un cruce de recetas, sino de formas de ver la cocina. La tradición se construye desde la memoria; la cocina de autor, desde la interpretación personal. Ambas son legítimas, ambas necesarias. Mientras en Michoacán el tiempo es un ingrediente más, en Baja California la experimentación está en el ADN. Y sin embargo, ambas cocinas nacen de un mismo impulso: compartir.
Una geografía emocional
Aunque Michoacán y Baja California comparten bandera, son realidades culturales distintas. Una, tierra de fiestas patronales, danzas y bordados; la otra, cuna del vino mexicano, del arte contemporáneo y de paisajes abiertos al mar. Pero en Casa Frida, las fronteras se difuminan. El arte, la hospitalidad y la pasión por lo nuestro son el hilo conductor de esta colaboración.
Este Take Over es más que una cena: es un homenaje a lo que nos une. A los sabores que cuentan historias. A los encuentros que transforman. La cita es el sábado 3 de mayo, en el corazón del Valle de Guadalupe. La mesa está puesta. Los sabores, listos para sorprender.
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